CONTRAPUNTOS AL CAMINO DEL
OPUS DEI
Autor: Mosén Josep Dalmau
VIDA SOBRENATURAL
Punto 279. La gente tiene una visión plana,
pegada a la tierra, de dos dimensiones. -Cuando vivas vida
sobrenatural obtendrás de Dios la tercera dimensión:
la altura, y, con ella, el relieve, el peso y el volumen.
Contrapunto. No se puede mirar el Sol de hito en hito,
"porque deslumbra y no nos deja ver las cosas que nos
rodean. Hay cristianos -y es un defecto grave- que están
tan absortos en la vida sobrenatural, que han perdido de vista
o ven desfiguradas las dimensiones del mundo temporal; no
conocen ni su peso, ni su volumen, ni su medida.
Punto 280. Si pierdes el sentido sobrenatural de
tu vida, tu caridad será filantropía; tu pureza,
decencia; tu mortificación, simpleza; tu disciplina,
látigo, y todas tus obras, estériles.
Contrapunto. Si pierdes el sentido natural de las
cosas -también la creación, con todas sus implicaciones,
es obra de Dios-, tu caridad será, en el mejor de los
casos, paternalismo; tu pureza, fruto de un tabú sexual;
tu mortificación, puro ejercicio sin objeto; tu disciplina,
falta de libertad, y tus obras, castillos en el aire.
Punto 281. El silencio es como el portero de la
vida interior.
Contrapunto. Dialoga. El silencio es la frontera que
nos separa de los otros. Es una costra que se replega sobre
nosotros mismos y nos esteriliza.
Punto 282. Paradoja: es más asequible ser
santo que sabio, pero es más fácil ser sabio
que santo.
Contrapunto. Es muy fácil opinar sobre la santidad.
Pero es más difícil acertar. ¿Quién
podría decir que un Lumumba no fue santo y mártir?
Pudo hacerlo sido muy bien. ¿Y no será precipitarse
un poco llamar "Santo Padre" al Papa?
Punto 283. Distraerte. - Necesitas distraerte!...,
abriendo mucho tus ojos para que entren bien las imágenes
de las cosas, o cerrándolos casi, por exigencias de
tu miopía... Ciérralos del todo!: ten vida interior,
y verás, con color y relieve insospechados, las maravillas
de un mundo mejor, de un mundo nuevo: y tratarás a
Dios..., y conocerás tu miseria..., y te endiosarás...
con un endiosamiento que, al acercarte a tu Padre, te hará
más hermano de tus hermanos los hombres.
Contrapunto. No creas que el que cierra los ojos tiene
ya vida interior. A veces tiene una vida vacía. Una
cierta contemplación es inseparable de toda acción,
porque las cosas, los acontecimientos y los otros hombres
tienen también un hondón, que no se ve con los
ojos cerrados, y en este hondón exterior, aletea el
espíritu de Dios.
Punto 284. Aspiración: Que sea yo bueno,
y todos los demás mejores que yo.
Contrapunto. Puesto a opinar, no te quedes corto.
No quieras ser menos bueno que los otros. Pero tampoco más.
Punto 285. La conversión es cosa de un instante.
-La santificación es obra de toda la vida.
Contrapunto. La conversión es cosa de todos
los días, la santificación puede ser obra de
un instante.
Punto 286. Nada hay mejor en el mundo que estar
en gracia de Dios.
Contrapunto. Es difícil acertar quién
es el mejor. ¡Es todo tan relativo en la Historial Decir
que no hay nada mejor en el mundo que estar en gracia de Dios
no es decir nada. ¿Quién está y quién
no está en gracia de Dios? He aquí el busilis.
Punto 287. Pureza de intención. -La tendrás
siempre, si, siempre y en todo, sólo buscas agradar
a Dios.
Contrapunto. La pureza de intención no es monopolio
de los que creen en Dios. La bondad es lo que la provoca,
y ésta existe en grandes proporciones en todos los
hombres.
Punto 288. Métete en las llagas de Cristo
Crucificado. -Allí aprenderás a guardar tus
sentidos, tendrás vida interior, y ofrecerás
al Padre de continuo los dolores del Señor y los de
María, para pagar por tus deudas y por todas las deudas
de los hombres.
Contrapunto. Profundiza tu fe y tu piedad y no des
excesiva importancia a tu devoción a las llagas de
Cristo, a su corona de espinas, la santa faz y otros detalles
anecdóticos. No te pierdas por las ramas del árbol
grande.
Punto 289. Tu impaciencia santa, por servirle,
no desagrada a Dios. -Pero será estéril si no
va acompañada de un efectivo mejoramiento en tu conducta
diaria.
Contrapunto. La impaciencia es siempre impertinente,
aunque sea para servir a Dios. No creas mucho en estos celos
destemplados; casi siempre se salen con la suya.
Punto 290. Rectificar. -Cada día un poco.
-Esta es tu labor constante si de veras quieres hacerte santo.
Contrapunto. Puede muy bien suceder que el rectificar
no sea otra cosa que emprender un camino equivocado. En ese
caso rectificación es igual a colaboracionismo nefasto.
¿No te viene a la cabeza el recuerdo del mariscal Pétain?
Punto 291. Tienes obligación de santificarte.
-Tú también. -¿Quién piensa que
ésta es labor exclusiva de sacerdotes y religiosos?
A todos, sin excepción, dijo el Señor: "Sed
perfectos, como mi Padre Celestial es perfecto".
Contrapunto. Decir que los cristianos tenemos obligación
de santificarnos es una perogrullada. Pero no es cierto que
has de ser santo como lo quieran los otros, por muy superiores
que sean. La santidad es siempre una creación personal.
Tenlo siempre muy claro y no te dejes embaucar.
Punto 292. Precisamente tu vida interior debe ser
eso: comenzar... y recomenzar.
Contrapunto. No se puede del todo comenzar de nuevo
en la vida. Lo que hayamos vivido -bien o mal- nos marca para
siempre. No podemos tachar el pasado. Nuestro destino es continuar.
Punto 293. En la vida interior, ¿has considerado
despacio la hermosura de "servir" con voluntariedad
actual?
Contrapunto. ¿Te has parado a contemplar la
belleza de los que han tomado de una vez para siempre una
actitud de servicio? No sufren los bandazos y las contramarchas
de los que necesitan orientarse a cada hora, porque caminan
sin brújula.
Punto 294. No se veían las plantas cubiertas
por la nieve. -Y comentó, gozoso, el labriego dueño
del campo: "ahora crecen para adentro." -Pensé
en ti: en tu forzosa inactividad... -Dime: ¿creces
también para adentro?
Contrapunto. Sólo hay una manera de crecer
hacia. adentro: asimilar todo lo que hay de positivo hacia
fuera. Y por esto no se puede estar desligado o ausente de
nada que interesa a los hombres.
Punto 295. Si no eres señor de ti mismo,
aunque seas poderoso, me causa pena y risa tu señorío.
Contrapunto. Me asusta el que seas señor de
ti mismo y poderoso a la vez. ¿Has oído hablar
alguna vez del despotismo ilustrado? ¿ Es que los menos
dotados no tienen acaso derecho a la vida? .
Punto 296. Es duro leer, en los Santos Evangelios,
la pregunta de Pilato: "¿A quién queréis
que os suelte, a Barrabás o a Jesús, que se
llama Cristo?" -Es más penoso oír la respuesta:
" A Barrabás!" Y más terrible todavía
darme cuenta de que muchas veces!, al apartarme del camino,
he dicho también " a Barrabás!", y
he añadido "¿a Cristo?... "Crucifige
eum!" - Crucifícalo!"
Contrapunto. No seas bobo o -peor- hipócrita.
Tú, que quieres ser de los buenos, a la pregunta de
Pilatos: "¿A quién queréis que suelte:
a Barrabás o a Jesús?", ¿no hubieras
gritado: "¡A Jesús de Nazaret!"? Eres
un pobre infeliz que necesita como todos el sacrificio de
Cristo. Pero que aceptes recibir sus frutos no quiere decir
que le hubieras sacrificado tú mismo, ingenuo.
Punto 297. Todo eso, que te preocupa de momento,
importa más o menos. -Lo que importa absolutamente
es que seas feliz, que te salves.
Contrapunto. Pasar un río de orilla a orilla
de un tirón depende directamente del impulso del arranque.
Lo que importa más es el arranque; lo demás
viene solo. Por eso no conviene que digas: "lo que ahora
me chifla tiene una importancia relativa; lo que importa es
salvarme". Tienes que invertir los términos.
Punto 298. Luces nuevas! -Qué alegría
tienes por que el Señor te hizo descubrir otro Mediterráneo!
-Aprovecha esos instantes: es la hora de romper a cantar un
himno de acción de gracias: y es también la
hora de desempolvar rincones de tu alma, de dejar alguna rutina,
de obrar más sobrenaturalmente, de evitar un posible
escándalo en el prójimo... -En una palabra:
que tu agradecimiento se manifieste en un propósito
concreto.
Contrapunto. Cuando en tu vida descubras de sopetón
el Mediterráneo, no te embarques muy de prisa. Al cabo
de unos cuantos días te darás cuenta que el
mar descubierto era sólo la sopa de ajo que la gente
toma desde el año de la nanita. Ojalá que esta
experiencia te evapore los humos que a menudo te das. Vas
muy a. la zaga de muchos.
Punto 299. Cristo ha muerto por ti. -Tú...
¿qué debes hacer por Cristo?
Contrapunto. Te mereces la cárcel.. Tú
sabes bien cuántas fechorías -ocultas- has cometido;
pero Cristo ha venido también a librarte de ellas.
Punto 300. Tu experiencia personal -ese desabrimiento,
esa inquietud, esa amargura- te hace vivir la verdad de aquellas
palabras de Jesús: nadie puede servir a dos señores!
Contrapunto. "No se puede servir a dos señores".
Aquí está nuestra tragedia. Nosotros frecuentemente
no hacemos otra cosa sino hacer posible esta imposibilidad.
Vivimos dentro del absurdo. En esto, como en tantas cosas,
Sartre da en el clavo.
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